La esposa de Victor Cemborain se metió en la pelea personal que su marido tiene con Ricardo Colmbi y utilizó el día de la fiesta del pueblo para enrostrar “viejos reclamos“ al Gobernador nuevo.

El matrimonio doble comando que está a cargo del municipio de Mercedes eligió el odio y el resentimiento para empuñar viejos reclamos institucionales que no se animaron a plantearlos de manera formal.

Sistemáticamente ambos se negaron a las reiteradas invitaciones, por lo menos dos, que el Gobierno de Valdes hizo llegar para dialogar y encontrar respuestas a sus pretendidos reclamos.

Ya sin el kirchnerato en el poder con quienes supieron abrazarse mientras se corrompía el país, es cierto también que el matrimonio hoy busca posicionarse en la esfera política como partido de barrio.

Están solos los dos y esos “amigos intendentes y referentes de la kk” que supieron acompañarlos están todos escondidos, en el llano y otro tantos presos por ladrones.

Camau no está. Ríos perdió la Capital. Ba$$i perdió Goya. Los Rubin perdieron Curuzú. Los “Corona“ de Perugorría perdieron y están presos.

Cemborain y su esposa están desubicados en tiempo y en espacio y por eso desnudan sus miserias cobardemente. No es momento de campaña y para colmo no tienen respaldo, más que la billetera personal y algún “viejo pillo“ de los 90´ que fiel a su modus operandi intenta vaciarla a cambio de promesas infantiles.

Resulta oportuno mencionar que entre las quejas de la mandamás comunal, esposa del ex capo municipal Víctor Cemborain, mencionó la retención de fondos de la Dirección Provincial de Energía de Corrientes (Dpec) durante la gestión de Colombi. 

Valdés, al igual que la sorpresa que tuvo al escuchar la perorata de la anfitriona, sostuvo luego,"me sorprendió porque no es habitual tener este tipo de planteos y reclamos, pero estamos dispuestos a contestar, a conversar, a trabajar en este tipo de cosas", aseguró.

Otro de los que tomó la palabra para criticar la desubicada postura de Sánchez fue el ministro Secretario General de la Gobernación Juan Carlos Álvarez. "La Intendente de Mercedes tuvo un discurso que no era el momento indicado, lleno de reclamos y rencor", espetó el funcionario, quien remarcó el "espíritu municipalista y federalista -del Gobierno-".

"Lo demostramos siempre. Estamos acompañando a la ciudadanía. Las cuestiones políticas y partidarias pasan a segundo plano en un día como hoy -por ayer-", aseveró.

Álvarez aprovechó para repasar que la de este jueves fue "la primera vez que la Intendente recibió al Gobernador. Las otras veces hubo dichos y entredichos, que me inventaron y no me invitaron. No pudo acompañar al Gobierno provincial a la inauguración de muchas obras que se hicieron y hacen en la localidad, para que los mercedeños puedan vivir mejor".

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