En la historia quedará hoy el actual intendente Lucio Fernández y su compañera de formula Susana Leiva de la UCR, al conseguir romper el récord glorioso de obtener la reelección en la intendencia de Concepción.
Ningún intendente nunca había podido lograr ser reelecto. Esta vez 2206 votos fueron mas que 1227. Dentro de la alianza que ganó la elecciones en Concepción, y después del partido Liberal, la UCR fue el partido que más votos obtuvo y por ende ahora se ganó la oportunidad, firmada mediante acta acuerdo, de encabezar la fórmula dentro de 4 años.
El récord del fracaso contundente que quedará en la historia negra cayó, por segunda vez, en José Omar Hechem y su padrino político Segio Moises Flinta.
Es que el actual senador provincial Sergio Flinta NO envió un solo apoyo a quien hoy resultó electa Vice Intendente por la lista 3 de la Unión Cívica Radical Susana Leiva.
Flinta había decidido “mantenerse al margen” en la lista oficial y virar sus pretensiones personales, por sobre las políticas al derrotado sin partido José Omar Hechem, quien por segunda vez buscaba llegar a la jefatura municipal.
Ahora la dupla Hechem-Flinta vuelve a alzarse con otra derrota más contundente y se espera que la UCR CENTRAL le pida explicaciones al “estrellado” senador provincial, quien estaba “encargado políticamente” de esa jurisdicción.
Susana Leiva, en su carácter de actual presidente de la UCR en el pueblo había avanzado en un acuerdo con el actual intendente del partido Liberal Lucio “pipo” Fernández, quien resultó electo esta vez.
El aplastante triunfo sobre los intereses personales de Flinta y Hechem dejan un claro mensaje a estos personajes que subestimaron al ciudadano de Concepción.
Es hora que la UCR tome cartas en el asunto y revea este tipo de conductas para nada leales que son ya “naturales en Flinta“ cada vez que hay elecciones. Es que orgánicamente la UCR del pueblo no acata la conveniencia personal de Flinta y entonces quiita todo el apoyo que se requiere. Por segunda vez Flinta quedó desnudo y en el pueblo ya nadie calla y castiga votando.
